CALABACINES RELLENOS DE CARNE Y QUESO

PREPARACIÓN: 50 minutos

INGREDIENTES para 4 a 6 personas
4 calabacines grandes y gruesos
200 g de carne, un resto (ya cocido o asado)
1 tazón de salsa de tomate
1 bote de queso fresco de 100 g
3 o 4 cucharadas soperas de pan rallado
25 g de mantequilla o margarina
1 cebolla mediana (100g)
1 cucharada sopera de mostaza
6 cucharadas soperas de aceite
Agua y sal

ELABORACIÓN
Pela los calabacines (quitando lo menos posible de piel) o incluso, si son frescos, puedes no pelarlos y córtarlos en trozos de unos 4 centímetros.
En un cazo, pon agua con sal a cocer. Cuando hierva a borbotones, pon los trozos de calabacines y, en el momento en el que agua rompa a hervir de nuevo, se dejan de 8 a 10 minutos, según sean de frescos y de grandes. Sácalos y escúrrelos con un paño.
Mientras, pica muy menuda la cebolla y rehógala en una sartén con 2 cucharadas soperas de aceite. Debes rehogarla muy despacio para que apenas se dore. Una vez picada la carne, mézclala con la cebolla, la mostaza y el queso, salando ligeramente la mezcla.
Vacía los calabacines con una cuchara o con el aparato de redondear patatas, pero ten cuidado de no llegar hasta el fondo. Cuando hayas terminado, rellénalos con la mezcla de carne, cebolla y queso.
En una fuente para horno, algo alta de bordes, pon un fondo de aceite (las 3 o 4 cucharadas que han sobrado de las cebollas). Coloca los calabacines bastante apretados. Después, cúbrelos con la salsa de tomate, espolvoréalos con algo de pan rallado, pon una avellana de mantequilla sobre cada calabacín y deja que se doren en el horno, previamente calentado, durante 25 minutos. Sírvelos en la misma fuente.

UN CONSEJO
Si quieres un relleno con algo más de consistencia, puedes añadir un poco de miga de pan, puesta previamente a remojar en leche.
Para darle un plus de vitamina C, añade al relleno perejil picado.
Puedes sustituir la salsa de tomate por cubitos de tomate fresco.