TARTA A LOS CUATRO QUESOS

PARA 4 PERSONAS
DIFICULTAD: Fácil
PREPARACIÓN: 60 minutos

INGREDIENTES
400 ml de nata
100 g de quesos variados
150 g de azúcar
8 g de gelatina en polvo
1 rama de canela
Anís en grano
80 g de galletas maría
Mantequilla
Frutos del bosque para decorar

ELABORACIÓN
Cortar los quesos en dados y ponlos en una tartera. Agrega 100 gramos de azúcar, una rama de canela, una pizca de anís en grano, la gelatina en polvo y 200 mililitros de nata líquida.
Pon el recipiente a fuego lento y remueve continuamente hasta que el queso se funda. Aparta la tartera del fuego, retira la rama de canela y deja que la crema se enfríe y espese un poco.
Bate la nata y el azúcar restante e incorpora poco a poco la crema de queso.
Tritura las galletas y mézclalas con un poco de mantequilla.
Reparte la pasta de galletas en cuatro moldes en forma de aro para hacer tartas individuales y presiónala con una mano de mortero.
Deja enfriar los moldes en el frigorífico durante una media hora para que las galletas quede compacta y sirva de base a la tarta.
A continuación, rellena los moldes con la crema de queso y vuélvelo a dejar en el frigorífico otra media hora para que la crema adquiera consistencia.
Retira los moldes y decora las tartas con frutos del bosque (mora, arándanos, frambuesas...).

TRUCO
Esta tarta permite aprovechar restos de quesos que tengamos en el frigorífico: en porciones, manchego semicurado, cheddar, emmental, etc.
Si no se tienen a mano frutas del bosque, las tartas se pueden decorar con trozos de frutas del tiempo (fresas, por ejemplo), frutas exóticas u hojas de menta.
Para tener moldes en forma de aro del tamaño que se quiera, en las tiendas especializadas en utensilios de cocina venden rollos de acetato de unos 5 cm de ancho. Para hacer el molde, basta con cortar un trozo de la longitud deseada y unir los extremos con celo.