PREPARACIÓN: 20 min
COCCIÓN: 5 min
DIFICULTAD: mínima
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS
150 g de champiñones pequeños
35 g de queso azul
1 diente de ajo picado
1 yema de huevo
Pimienta negra recién molida
1 pellizco de cayena
1 huevo batido
35 g de pan fresco recién rallado
Abundante aceite para freír
Sal
ELABORACIÓN
Retirar con cuidado los tallos de los champiñones. Limpiar bien los sombrerillos.
Aplastar el queso con un tenedor en un cuenco hasta convertirlo en una pasta. Mezclar con el ajo picado y la yema; luego, sazonar con una pizca de sal, pimienta molida y cayena.
Rellenar los champiñones con la mezcla de queso, de forma que sobresalga un poco, como si fuese otro sombrerillo. Pasarlos primero por el huevo batido y después rebozar con el pan rallado.
Calentar el aceite a 180ºC en una satén honda y freír los champiñones por tandas, hasta que estén dorados. Sacar y dejarlos escurrir bien sobre papel absorbente para retirar el exceso de grasa. Servir inmediatamente.
DE SORPRESA EN SORPRESA
Prepara otra tanda de champiñones con rellenos variados; por ejemplo, taquitos de jamón, cebolla y los tallos de los champiñones, todo bien picado, con un poco de sal, y salteado en aceite. Para amalgamar bien los ingredientes mézclalos con una salsa besamel. Tus invitados no sabrán qué sorpresa van a encontrar bajo el empanado.
LIMPIEZA A FONDO
La parte más terrosa es el tallo, pero no por ello hay que olvidar el sombrerillo. Como se trata de un alimento que absorbe con facilidad el agua, pásalos bajo un chorro fino y frío, procurando que no estén mucho tiempo en contacto con el agua; nunca en remojo. Frota suavemente con un cepillo blando y seca con un papel absorbente.
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